Cuando pasamos por una tribulación fuerte ni Dios ni nosotros queremos que suceda
Observación: donde dice salmo 190 debe decir salmo 130
Él quiere liberarnos rápidamente de ella, no quiere que suframos
Y también quiere que la tribulación nos sirva para estar más cerca de Él, que no pase en vano
En este vídeo te voy a contar cómo actúa Dios en nuestras tribulaciones
Y cómo espera que nosotros actuemos en ellas
Y al final del video hay un camino de 4 pasos que deberíamos recorrer para obtener la asistencia más efectiva de Dios en estas situaciones
Muchos se preguntan ¿cómo si Dios es todo bueno y todo poderoso, permite el sufrimiento? ¿por qué no acaba con él ya?
Veamos un poco cual es la responsabilidad nuestra y la de Él en nuestras tribulaciones y como Él actúa
Muchas veces el sufrimiento viene de la propia conducta directa e inconsciente del hombre
Si pones tu mano sobre una estufa caliente, experimentarás dolor
Y ese dolor es una respuesta natural para lograr que retires la mano de la estufa
Este tipo de sufrimiento que viene de la conducta inconsciente del hombre, también puede ser causado por instituciones, empresas, gobiernos a través de su decisiones
Por ejemplo una compañía eléctrica puede colocar líneas de alto voltaje en un vecindario y resulta que vivir cerca de esas líneas causa una mayor probabilidad de cáncer
O por ejemplo la comunidad internacional envía tropas para derrotar a un dictador genocida y restaurar la libertad, pero el precio de esa justicia puede ser un sufrimiento generalizado entre los inocentes por la guerra
Estos son sufrimientos que hemos provocado nosotros mismos, pero sin malicia ni intención
Y son ejemplos de sufrimientos no causados por Dios, sino por los seres humanos de una forma u otra
Y entonces la respuesta debe ser humana ante todo
Pero cuidado, Dios no está ausente, le podemos pedir y Él nos auxiliará
En segundo lugar está el sufrimiento que directamente nosotros provocamos por nuestras propias elecciones
Si bebes un litro de whisky todos los días, probablemente desarrollarás una enfermedad hepática y otros trastornos dolorosos
También te traerá dolencias físicas si fumas, o no haces más que comer comida chatarra
Las elecciones tienen consecuencias y una gran cantidad de nuestro sufrimiento es provocado por nuestras propias malas decisiones
En tercer lugar está el dolor que le causamos a otras personas a través del crimen, el abuso, la violencia, la codicia, la lujuria
También sucede a niveles más globales como por ejemplo cuando empresas hacen especulaciones para enriquecerse fraudulentamente o gobiernos enteros trafican drogas
Lastimamos a otras personas
Y la responsabilidad de esto tampoco se puede poner en la puerta de Dios
¿Y Él detiene estos abusos?
Él ve todo el sufrimiento que estamos causando a los demás, y se lamenta por ello, tratará de mostrárnoslo de todas las formas posibles para que cambiemos
Pero además, cuando el sufrimiento viene como resultado de nuestro pecado, entonces hay un juicio natural que está incorporado al pecado mismo
Son muy pocos los casos de grandes delincuentes que finalmente no son atrapados y castigados aún en la Tierra, y ni que decir en la vida eterna
Dios diseñó el sistema para que funcione de cierta manera y cuando nos desviamos de su plan, las consecuencias son nefastas
Y queda otra categoría de sufrimiento, los desastres naturales, una peste o epidemia, un terremoto, un tsunami o defectos de nacimiento, que parecen ser parte del orden natural
¿Por qué Dios no resuelve esos problemas y quita ese sufrimiento del que los seres humanos no son responsables directamente?
La respuesta cristiana siempre ha sido que todo en el mundo está roto y que la naturaleza ha caído por nuestro desorden
No es Dios el que creó el desorden sino la desobediencia de la humanidad, al alejarse de lo que Dios nos pide en nuestro diseño original
Sin embargo Él actúa cuando se lo pedimos con insistencia y nos libra de una u otra forma de esas tribulaciones
Pero utiliza estas cosas como una llamada de atención, para recordarnos que debemos volver a Él, no pasan en vano